Cada día es una página en blanco, escribe algo que valga la pena leer

Cada amanecer nos brinda la posibilidad de comenzar desde cero. No importa lo que haya sucedido el día anterior; hoy se presenta como una hoja en blanco lista para ser escrita. Somos los narradores de nuestra propia historia y, aunque los capítulos pasados no puedan modificarse, sí tenemos el poder de decidir el rumbo de las páginas que vienen. La inspiración no siempre se presenta por sí sola; en muchas ocasiones debemos ir a su encuentro, ya sea en una charla, en la lectura de un libro, en una vivencia diferente o incluso en la calma del silencio. Lo esencial es recordar que cada elección, por insignificante que parezca, moldea el relato de nuestra existencia. Aprovechar el día no implica alcanzar la perfección, sino avanzar un paso más hacia aquello que alimenta nuestro espíritu. Cada nuevo amanecer nos recuerda que la pluma sigue en nuestras manos.